La llaman la jungla de asfalto, pero la ciudad de Nueva York contiene una nutrida población de árboles en sus parques y calles. Lejos de ser una simple cuestión estética, la vegetación urbana está destinada a convertirse en una de las principales herramientas para mitigar los efectos del cambio climático en las ciudades. Ya hemos hablado en otras ocasiones cómo los avances científicos y tecnológicos pueden contribuir a un mundo más sostenible, pero lo cierto es que hay pocas cosas mejores que recurrir a la propia naturaleza para resolver los desaguisados humanos. En ese sentido, el nuevo mapa de árboles de Nueva York desarrollado por el NYC Parks Department permitirá conocer el estado y la ubicación de cada uno de sus ejemplares para garantizar su bienestar.
Un mapa de árboles de Nueva York con nombres y apellidos
El mapa digital de árboles de Nueva York cubre algo más de tres mil hectáreas de parques y zonas urbanas no boscosas en los cinco distritos de la ciudad. El proyecto no solo cubre parques y calles, sino también árboles de casas históricas, jardines comunitarios o parques infantiles. Los usuarios del mapa podrán consultar más de ochocientos mil ejemplares de árboles con características como las siguientes:
- Especie de cada árbol
- Ubicación exacta
- Estado de mantenimiento (podas, riego, etc.)
- Registro de inspecciones, incluyendo trabajos inminentes
Además, la herramienta ofrece interesantes estadísticas sobre la contribución económica de cada árbol en términos de la polución aérea que ha eliminado o la energía que ha permitido ahorrar. Esta funcionalidad busca concienciar a la población de todos los beneficios que se derivan de la presencia de los árboles en sus calles. Por último, el mapa ofrece la posibilidad de notificar enfermedades o daños sufridos por ejemplares específicos para que las autoridades municipales intervengan lo antes posible.
El proyecto de mapa de árboles de Nueva York comenzó con el inventario de ejemplares en los años 2016-2018 hasta convertirse en lo que sus impulsores consideran el mayor registro actualizado de árboles vivos del mundo. Los datos se han recabado gracias a la colaboración de los empleados municipales y un grupo de voluntarios. Conscientes de los beneficios que tienen para una ciudad, decidieron que el registro pasara a ser una herramienta interactiva a disposición de los ciudadanos.
Algunos datos curiosos sobre los árboles de Nueva York
Tal como sucede en un bosque, cada ciudad cuenta con un tipo de vegetación. A modo de curiosidad, los impulsores del mapa de árboles de Nueva York han hecho un resumen de algunos datos sorprendentes. Por ejemplo, la ciudad cuenta con más de medio millar de especies. Estos son algunos de los datos más llamativos:
- Tres principales especies: plátano de sombra (18 161 árboles o 11,6 % del total), roble de los pantanos (15 002 árboles o 9,6 % del total) y acacia de tres espinas (6929 árboles o 4,4% del total).
- Parques de Nueva York con más árboles: parque Flushing Meadows Corona (8698 árboles) y parque Prospect (3995 árboles).
- Árboles en parques por distrito: Queens (40 617), Manhattan (39 273), Bronx (33 338), Brooklyn (32 580), Staten Island (10 817).
- Número total de variedades de árboles: 570 tipos diferentes de árboles en calles y parques.
Si quieres dar un paseo virtual y entender mejor los árboles que pueblan la ciudad, tienes el mapa de árboles de Nueva York aquí.
Principales beneficios de los árboles para una ciudad
El urbanismo moderno tiene cada vez más presente los beneficios de los árboles para una ciudad más sostenible. El propio departamento de parques de Nueva York los ha sintetizado de la siguiente manera:
- Conservación energética. Los árboles mantienen las temperaturas más estables, ofrecen sombra para los edificios, atenúan la fuerza del viento y reducen la temperatura ambiente en verano. Esto redunda en el bienestar de los peatones y en un menor gasto energético de los edificios.
- Intercepción del agua de las tormentas. Las copas de los árboles impiden que el agua caiga torrencialmente y atrapan gran parte de ella en su copa, lo que evita que los contaminantes atmosféricos lleguen al suelo.
- Eliminación de polución aérea. Los bosques urbanos atrapan partículas contaminantes como el dióxido de nitrógeno o el dióxido sulfúrico, así como otras partículas en suspensión, mejorando la calidad del aire. Al reducir la temperatura también reducen el consumo energético, lo que a su vez deriva en una menor producción de energía contaminante.
- Atrapan el dióxido de carbono. Las hojas y ramas de los árboles atrapan el CO2 atmosférico generado por vehículos y sistemas de calefacción.
Si, aparte del mapa de árboles de Nueva York, quieres conocer otros ejemplos de cómo la vegetación puede mejorar la calidad de vida en las ciudades, te recomendamos este artículo sobre el uso de musgo en jardines verticales o este otro sobre un prototipo de ruedas con musgo que atrapan el CO2. Los árboles pueden convertirse también en arquitectura viva de las ciudades, tal como te contábamos en este artículo.
Fuentes: